La batalla de Monte Caseros (ocurrida en el campo de la familia Caseros, fue en lo que es hoy la localidad de El Palomar, en la provincia de Buenos Aires) enfrentó a las tropas de Juan Manuel de Rosas, con las del llamado Ejército Grande, cuyo comandante era el general Justo José de Urquiza.
Este combate que tuvo lugar el 3 de febrero de 1852, levó a los gobernadores de las provincias a la firma del Acuerdo de San Nicolás, impulsando un camino de organización nacional. Se firmó el 31 de mayo de ese año entre 13 de las 14 provincias vigentes por entonces. Buenos Aires no lo hizo, sumándose en 1860. En San Nicolás, se aprobó trabajar para la sanción de una nueva y definitiva constitución.
La nueva constitución se redactó y se sancionó al año siguiente y siempre con la provincia de Buenos Aires ausente.
A 169 años, de la batalla de Caseros, con intentos cíclicos de integración de objetivos, no se han logrados los caminos esenciales de políticas públicas firmes y duraderas en el tiempo.
El conflicto era esencialmente económico. La provincia de Entre Ríos gobernada por Urquiza reclamaba la libre navegación de los ríos, ya que ello le permitía comercializar su producción con sus vecinos de Uruguay y Brasil y abrirse otros mercados, sin pasar por Buenos Aires.
A lo largo del tiempo no se ha podido acordar con perdurabilidad lineamientos básicos en políticos de desarrollo, crecimiento y inflación, entre otros puntos como un reforma tributaria integral y de posible cumplimiento.