La guerra duró 74 días y resultó en la muerte de cientos de soldados y civiles argentinos, quienes lucharon por defender la soberanía del país. La rendición argentina marcó el fin del conflicto, pero no resolvió la disputa territorial subyacente.
Hoy, 43 años después, seguimos reclamando la soberanía sobre las Islas Malvinas y manteniendo la posición de que las islas son parte de nuestro territorio nacional. La comunidad internacional reconoce la disputa territorial y ha instado a ambas partes a encontrar una solución pacífica y justa.
La memoria de los soldados argentinos que lucharon y murieron en la Guerra de las Malvinas sigue viva en la conciencia nacional. La causa Malvinas sigue siendo un tema prioritario en la agenda nacional y un símbolo de la lucha por la soberanía y la integridad territorial.