Desde este martes, la ciudad de Nueve de Julio comienza a adquirir un nuevo ritmo. A la cuarentena obligatoria se suma que los comercios, aquellos esenciales en la Emergencia Sanitaria vigente, abrirán sus puertas de 9 a 18 hs.
La ciudad amanece tranquila, y casi desierta. Es que la ausencia de padres que se movilizan, junto a niños y docentes a las aulas, para luego ir a sus tareas habituales ya no son la postal ce cada mañana.
Desde ahora, con esta normativa y los cuidados que se deben tener por salud pública y personal, ponen a todo la comunidad en un sistema de resguardo más acotado.
A ciertos desbordes que se suscitaron en el aprendizaje de cada día ante el coronavirus, comienzan a encontrarle el causa del cual depende, para que todo marche ordenadamente, de cada vecino más allá del mensaje de las autoridades de gobierno y sanitarias.
Es que todo ha sido precipitado y ahora con este nuevo horario pondrá a la ciudad a un ritmo, más Europeo que sudamericano, donde las demandas sectoriales y necesidades laborales de distinta naturaleza comienzan a convivir con recuadros de no contagio.
Los informes diarios del Comité de Crisis son alentadores dentro de un panorama sombrío. Tras casos positivos y dos bajo sospecha impulsan a seguir en Aislamiento con las excepciones y controles que cada uno debe anteponer a egoísmos y mezquindades.
Se pone en marcha un nuevo horario, junto a una mayor expresión de solidaridad colectiva y compromiso personal para que el coronavirus no ingrese en los hogares.
Es un desafío colectivo teniendo presente que la mejor vacuna, por ahora es #QuedateEncasa, cuidate y cuida a tu familia y vecinos.