En la Escuela Especial Nº 501 de Nueve de Julio se celebró ayer el Día de la Música con una jornada cargada de emoción, participación y talento. Entre autoridades, docentes, familias y estudiantes, el gran protagonista fue Pedrito Guazzaroni, un niño de 7 años con condición Down que cerró el evento tocando su batería y desatando una ovación.
La institución organizó una celebración especial para destacar el valor de la música como herramienta de expresión, integración y aprendizaje.
El profesor Juan Casas fue el encargado de guiar el encuentro con propuestas musicales que sumaron a todos los presentes, generando un ambiente de alegría y participación.
El momento más esperado llegó al final: Pedrito, sonriente y concentrado, subió al escenario con su pequeña batería. Con seguridad y entusiasmo, interpretó un ritmo que hizo vibrar a estudiantes y docentes. Su actuación fue celebrada con aplausos y emoción, convirtiéndose en el broche de oro de una jornada inolvidable.
Desde la Escuela Especial Nº 501 destacaron que la música es un puente que potencia las capacidades de cada estudiante y promueve la inclusión verdadera. Y Pedrito, con su talento y su energía, lo demostró una vez más.


