Las lluvias aisladas y los chaparrones débiles mantienen bajo observación la situación meteorológica en el noroeste de la provincia de Buenos Aires. Las zonas más afectadas hasta ahora son Ameghino y Lincoln, de donde se desplazan hacia el este núcleos de precipitación que podrían alcanzar en breve a localidades como Nueve de Julio, Los Toldos y Junín.
Aunque el cielo se muestra cargado de nubosidad y la humedad es perceptible, no se esperan lluvias intensas ni acumulaciones importantes. Las tormentas son aisladas y de baja intensidad, sin riesgo de fenómenos severos como granizo, ráfagas fuertes o inundaciones.
Se aconseja a los residentes:
estar atentos a los cambios en la nubosidad
evitar exposiciones prolongadas al aire libre si comienzan las lluvias
revisar techos, canaletas y desagües en caso de que acumulen agua
El pronóstico señala que las condiciones deberían mantenerse estables tras el paso de estos chaparrones, siempre sujeto a nuevas actualizaciones si la situación empeora.