En un gesto político cargado de simbolismo, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, y el histórico dirigente radical Federico Storani mantuvieron una reunión informal en la ciudad de La Plata. El encuentro tuvo lugar en uno de los cafés más emblemáticos de la capital provincial.
Durante la charla, ambos dirigentes intercambiaron visiones sobre la coyuntura política nacional y provincial. Según trascendió, coincidieron en la urgencia de construir una alternativa política “que genere esperanza en el pueblo” y esté centrada en los valores de la producción, el trabajo, la educación, la igualdad, con una fuerte sensibilidad social y un sentido nacional profundo.
La imagen del gobernador del Frente de Todos junto a una figura representativa de la Corriente de Opinión Nacional dentro de la UCR contrastó con otras postales recientes que muestran a sectores del radicalismo dialogando con referentes del oficialismo nacional, como Santiago Caputo y Karina Milei.
Si bien no se discutieron acuerdos electorales concretos, allegados a Storani descartaron cualquier acercamiento al PRO, a La Libertad Avanza o a los sectores del radicalismo alineados con el actual Gobierno nacional.
Entre otros temas, Kicillof y Storani habrían reflexionado sobre el impacto social y político de la reciente muerte del Papa Francisco. En ese sentido, ambos dirigentes remarcaron la necesidad de tomar su legado para impulsar desde la política una sociedad más humana, inclusiva y centrada en los sectores más postergados.
También habrían manifestado su rechazo a las declaraciones de la titular del FMI, Kristalina Georgieva, quien llamó a respaldar al presidente Javier Milei en los próximos comicios, algo que consideraron una injerencia indebida en la política interna del país.
Agencia MTR