En un mensaje que Francisco enviara a la Conferencia Episcopal le señala que ‘“A la Madre Patria no se la puede vender”.
Lo hizo ante el Bicentenario de la Declaración de la Independencia y añade ‘su cercanía con los hijos más llagados de la Patria’.
En la carta dirigida a “todo el pueblo argentino”, Francisco añade que quiere “estar cerca de los que más sufren” en el país, entre los que mencionó a “los enfermos, los que viven en la indigencia, los presos, los que se sienten solos, los que no tienen trabajo y pasan todo tipo de necesidad, los que son o fueron víctimas de la trata, del comercio humano y explotación de personas, los menores víctimas de abuso y tantos jóvenes que sufren el flagelo de la droga”.