La fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN, por sus siglas en inglés) anunció la vigésima edición de la campaña “Un millón de niños rezando el Rosario”, que tendrá lugar este martes 7 de octubre, coincidiendo con la festividad de Nuestra Señora del Rosario. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la convocatoria se llevará a cabo en la intersección de las avenidas Las Heras y Pueyrredón, un espacio elegido para unir en oración a cientos de niños y jóvenes.
Será en plaza Emilio Mitre y fue organizado por laicos y religiosos de diferentes Parroquias y Movimientos Católicos con el apoyo de la Vicaría Episcolal de Belgrano de la Arquidiócesis de Buenos Aires.
Bajo el lema “Por la paz y la unidad en un mundo herido por la división, los conflictos y el sufrimiento”, la iniciativa busca movilizar a niños de todo el mundo en una jornada de oración al unísono, inspirada por un evento ocurrido en Caracas, Venezuela, en 2005. Aquel 18 de octubre, un grupo de laicos organizó un rezo masivo del Rosario en plazas públicas, durante el cual muchos niños reportaron haber visto “escarcha” en sus manos, una experiencia interpretada como una señal celestial para continuar y expandir este apostolado.
Desde entonces, la campaña fue estructurada y difundida a través de las parroquias y escuelas por la Conferencia Nacional de Laicos (CNL) venezolana, y más tarde, con el respaldo de ACN, logró trascender fronteras, convirtiéndose en un movimiento de alcance internacional.
El padre Anton Lässer, asistente eclesiástico de ACN, instó a las familias, comunidades y escuelas católicas a sumarse a esta “marea de oraciones surgidas del corazón de los niños y hechas con confianza infantil”, subrayando el poder espiritual que tiene la oración infantil para “derribar muros, curar heridas y llevar luz a la oscuridad”.
Por su parte, el cardenal Mauro Piacenza, presidente internacional de ACN, destacó el valor de esta práctica espiritual: “El Rosario ofrece un oasis de contemplación en medio del ruido del mundo. No es una repetición vacía, sino un camino que nos lleva al corazón del Evangelio”.
Los organizadores invitan a todas las instituciones, grupos y familias a registrar su participación a través del sitio web oficial de la campaña, donde también se pueden descargar materiales didácticos en varios idiomas para ayudar a los niños a comprender el significado y la importancia de esta devoción mariana.
La jornada no solo es un acto de fe, sino también un llamado a la esperanza. En palabras del Cardenal Piacenza: “Recemos juntos para que se fortalezcan los lazos de comunión y para que el Espíritu Santo despierte en los corazones de los jóvenes un sincero deseo de santidad”.