El Intendente de Nueve de Julio encabezó el acto central del Día de la Bandera. Atento al frió de la mañana y toda vez que muchos alumnos participaban del mismo ante el compromiso de fidelidad, se dispuso hacer la ceremonia en la Escuela Técnica.
Del programa organizado – que contemplaba esa posibilidad ante el mal tiempo – se mantuvo depositar una ofrenda floral en el Monumento de Belgrano en la Plaza central de la ciudad, la cual lleva su nombre. La sencilla ceremonia estuvo a cargo del propio Intendente, de la Presidente del Concejo Deliberante, María José Gentile, y del Diputado bonaerense, Mauricio Vivani.
En el patio central de la Escuela Técnica, estaban las autoridades educativas, encabezadas por la Inspectora Jefa Disatrital Liliana Villabriga, quien le tomó el ‘Compromiso de Fidelidad’ a más de 600 alumnos de las distintas escuelas del distrito.
También representantes de instituciones de la comunidad, concejales y directivos docentes.
Mensaje textual del Intendente Mariano Barroso:
Nos encontramos celebrando en este día especial uno de nuestros símbolos más importantes como nación, obra de nuestro gran prócer el General Manuel Belgrano.
Fue un 27 de febrero de 1812 cuando Belgrano enarboló por primera vez nuestra bandera en Rosario, a orillas del Río Paraná, haciéndola jurar por las tropas revolucionarias. Los colores elegidos, celeste y blanco, fueron los colores que poco a poco cimentaron y construyeron nuestra gran nación. Pelear contra las fuerzas realistas no fue tarea sencilla, pero la determinación y entrega de hombres como Belgrano fue clave para lograr la victoria.
Belgrano es ejemplo de honra, de humildad, de sacrificio; pero también de benevolencia, baste recordar el comportamiento generoso del general después del triunfo total en la batalla de Salta, donde liberó a los 4000 prisioneros realistas. Esta ejemplar acción le valió numerosas críticas al ser posteriormente derrotado su ejército, pero que fácil era, y lo sigue siendo, criticar las acciones generosas estando lejos del campo de batalla.
Por este motivo, es necesario evocar hoy los valores de Belgrano que entregó su fortuna y su vida para conseguir la libertad; y para la creación de una sociedad en la que los valores de la república y la igualdad ante la ley fueran parte del nuevo estilo de vida.
Su ejemplo de lucha trascendió las fronteras del actual territorio argentino, y una corriente libertadora se expandió a lo largo de todo el continente sudamericano para hacer valer su voz frente al mundo.
Hoy podemos contemplar nuestra bandera flameando, hermosa y libre. Presente en victorias y derrotas que marcaron nuestra historia. Es, sin lugar a dudas, nuestra insignia como República.
Honremos también a quienes la defienden día a día trabajando y esforzándose para mejorar nuestro partido y nuestro país. Quienes con su esfuerzo mantienen vivo el espíritu de Belgrano, ese espíritu de generosidad que encontramos en los clubes, en las sociedades de fomento, en las instituciones; ese espíritu benévolo que encontramos en las escuelas, en los templos religiosos. El sacrificio permanente que encontramos en los trabajadores nuevejulienses, el espíritu de amor desinteresado que vive en todas las madres y padres. Reflexionemos también hoy junto a ellos y a todos los hombres y mujeres de bien que engrandecen a nuestro Nueve de Julio y nuestra Argentina.
Durante los últimos años hemos vividos tiempos de divisiones. Es tiempo de superar esa etapa. Es tiempo de unirnos y eliminar las barreras del pasado. Estoy convencido de que empujando todos para el mismo lado nada nos podrá detener y podremos superar cualquier obstáculo. Somos un pueblo virtuoso, con muchísimo potencial aún por explotar.
Debemos tener en claro que somos nosotros los responsables de explotar ese potencial. No debemos caer nuevamente en los enfrentamientos y divisiones que tantas penurias nos han causado en el pasado. Nuestro compromiso con el otro como ciudadanos debe ser de todos los días. Esta es la mejor forma de honrar nuestra bandera.
Les propongo entonces que sigamos trabajando juntos para que haya igualdad de oportunidades, para que cada nuevejuliense pueda tener oportunidades de desarrollarse en familia, en comunidad, que cada vecino pueda cumplir sus expectativas de vida, donde los jóvenes tengan las herramientas necesarias para poder crecer, donde los mayores se sientan respaldados y se respete las opiniones diferentes, porque de eso se trata la democracia.
Vivir mejor es la premisa de estos tiempos, y lo fue también para Belgrano. Enfrentar a los realistas, ser libres, ser una República tenía una primordial finalidad, VIVIR MEJOR. Por eso hoy más que nunca debemos hacer nuestro mayor esfuerzo para lograrlo. Para eso precisamos de todos los hombres y mujeres que sean competentes para conocer sus deberes, pero también conciencia para cumplirlos. Inspiremonos en los grandes homobres como Belgrano y de esta forma, estoy convencido, que el futuro será un mejor lugar para Nueve de Julio y para toda la Argentina.
Agencia MTR