Una vez más el radicalismo insiste en que Barroso baje su candidatura a Jefe Comunal nuevejuliense, y apoye junto al PRO, a Walter Battistella.
El tema será tratado el lunes en una ‘Mesa Chica’ por Mauricio Macri junto a otros puntos del orden nacional y bonaerense. Es que al Jefe de Gobierno porteño el pedido se lo hizo Ernesto Sanz como parte de una estrategia de unidad en todo el territorio de la provincia. Es por ello que en el orden nacional se referencia que el PRO empieza a entrar en etapa de definiciones, y la provincia de Buenos Aires es desde las últimas semanas la principal obsesión del jefe de Gobierno porteño, que deberá terminar de delinear el boceto del proyecto de gobierno.
En esa consideración se tendrá en cuenta el respaldo que el Presidente de Propuesta Republicana e Intendente Municipal de Vicente López, Jorge Macri, le viene dando a los jóvenes PRO nuevejulienses. Mauricio lo sabe y le pesa que sea puesto a consideración.
Al respecto se tiene presente el alto crecimiento del partido en el distrito. Las encuestas que le dan por encima del radicalismo, o mejor dicho del candidato UCR, Walter Battistella y a su vez, el nivel importante de credibilidad y confianza que tiene depositada la ciudadanía en los entusiastas juveniles con modalidades que llegan a los vecinos ya que no se caracterizan por hacer uso de la ‘vieja política’.
A ello se suma el trabajo de compromiso de instituciones y vecinos para presentar las propuestas de gobierno de cada área para cuando lleguen a la municipalidad. También debe considerarse que en el distrito son oposición como lo han evidenciado de la actual gestión.
Que desde la ‘Mesa Chica’ a pedido de Ernesto Sanz, se quieran ‘condicionar acuerdos’ en otros distritos o jurisdicciones a resultas del ‘caso Nueve de Julio’, es un despropósito que no condice con la idiosincrasia PRO, de respeto a las voluntades de cada lugar, máxime que se ha invertido y se invierte para que hoy por hoy sea una fuerza de alta competitividad con la UCR y el Justicialismo, reflexionaba un dirigente provincial al ser consultado sobre su pensamiento al respecto.
Por otra parte, que se ‘presione’ desde la mas alta conducción radical para la unidad en el distrito es no respetar todo el trabajo PRO y el apoyo de – cada día mas vecinos – de la gente e instituciones. Las PASO, para la definición es el único camino, ya que un acuerdo no querido y no deseado en la línea aliancista radical, pone al PRO local, al límite de su más mínima expresión echando por tierra su ardua y amplia tarea y entendiéndose como una falta de respeto a los vecinos para que se definan en ese espacio. Una cosa es acompañar al radicalismo si se pierde en agosto bajo la premisa peronista de que “el gana gobierno y el que pierde acompaña“; y otra, es un renunciamiento previo por querer incorporar posturas o modelos que bien pueden caber en otros distritos, pero no en éste; ya que retirase sin dar batalla por acuerdos fuera de ámbito y jurisdicción para beneficiar a un alicaído Battistella, lo descalificaría en toda su magnitud por renuncia a principios y valores que son seguidos con sumo cuidado dentro y fuera del partido, como aspecto diferencial positivo en la política actual.
En tanto, el radicalismo con el Intendente a la cabeza esperan con optimismo los resultados de las decisiones en la esperanza que un acuerdo no lo exponga en las PASO para pasar directamente a octubre. En este caso la estrategia de campaña tendría un giro altamente significativo.
A su vez, esos posibles votos PRO que son muchos, conforme a las encuestas y el ‘boca a boca’, hacia donde se desplazarán al ver un forzado renunciamiento para favorecer a quien se critica?.
La alianza PRO- UCR en el distrito está ‘al rojo vivo’ sin gas pimienta pero con mucha pimienta (PRO) y gas (UCR).