La Semana Mundial de la Lactancia Materna se celebra del 1 al 7 de agosto de cada año, con el objetivo de promover y proteger esta práctica fundamental para la salud pública. La iniciativa fue establecida en 1992 por la Alianza Mundial pro Lactancia Materna, en colaboración con la Organización Mundial de la Salud y UNICEF.
La lactancia materna es una de las formas más efectivas de garantizar la salud y el bienestar de los bebés. La leche materna es una fuente segura y rica en anticuerpos que protege a los bebés de enfermedades comunes, y los bebés amamantados suelen tener mejores resultados en pruebas de inteligencia y menor riesgo de obesidad y enfermedades crónicas. Además de los beneficios para los bebés, la lactancia materna también tiene un impacto positivo en la salud materna. Puede reducir el riesgo de cáncer de mama y ovario, diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares.
Para fomentar la lactancia materna, es esencial crear espacios seguros para amamantar en centros de trabajo y escuelas, ofrecer horarios flexibles para madres lactantes e informar sobre lactancia desde el embarazo y durante el proceso. También es importante fomentar la participación familiar en el cuidado del bebé y apoyo a la madre.
Agencia MTR