Este fin de semana, Facundo Quiroga vivió una noche inolvidable durante su esperado carnaval, que superó todas las expectativas. Más de 3000 personas se dieron cita en el evento, que desbordó las calles del pueblo. “¡Ay Dios, qué noche! La verdad, contentísimo, fue una fiesta increíble”, expresó el Delegado Municipal, uno de los organizadores, Juan Carlos Silva, quien destacó el ambiente festivo y la alegría de los asistentes.
El evento fue una respuesta a un cambio de escenarios de última hora. Aunque inicialmente el Club Atlético había programado sumarse a los corsos, a solo una semana y media del carnaval, decidió bajarse de la organización. Ante esta situación, Silva y su equipo, junto con la Concejal Maricel Unanua, decidieron tomar la iniciativa y ofrecer algo especial para la comunidad. “No podíamos dejar al pueblo sin su baile y corso”, comentó.
Con una organización que contó con el apoyo de tres instituciones locales – Taller de Canto Colectivo, Taller Protegido y la Escuela de Artes y Oficios, ‘Miriam Disavia’– se logró montar un suceso que, en palabras de Juan Carlos Silva, “explotó”. Las caravanas de luces se hicieron presentes desde la entrada del pueblo, y, a medida que avanzaba la noche, la fiesta no paraba. La música y el baile se extendieron hasta las primeras luces del día, cuando, a pesar de la energía y la emoción de todos, decidió poner fin a la fiesta.
“Fue una noche hermosa, la gente estaba agradecida y disfrutó mucho. Esto es lo que necesitamos para recuperar la alegría en el pueblo”, comentó.