Este domingo 28 de septiembre, como cada último domingo del mes, se llevará a cabo en todo el país la emblemática Barrileteada 2025, un evento que, más allá de ser una celebración, busca transmitir un mensaje de concientización a la sociedad. En esta oportunidad, el foco estará en los efectos que las pantallas de dispositivos móviles tienen en el desarrollo cognitivo y emocional de niños y adolescentes, así como en la creciente preocupación por la ludopatía digital.
La barrileteada, que se realiza cada año con el fin de concienciar a la población sobre distintos problemas de salud, pone esta vez sobre la mesa un tema de suma actualidad: el impacto negativo de la tecnología en el cerebro infantil. “Cuando un niño o adolescente se enfrenta al aburrimiento, el celular se convierte en la vía rápida para evitar la frustración. Pero este atajo impide que el niño explore su imaginación, desarrolle paciencia o aprenda a enfrentarse a la adversidad”, explica el pediatra y neurocientífico que lidera la iniciativa.
Efectos de las Pantallas en el Desarrollo Cerebral
El uso excesivo de pantallas desde temprana edad está afectando el cerebro en desarrollo. Según investigaciones científicas, los niños que pasan demasiado tiempo frente a dispositivos móviles experimentan cambios en la sustancia blanca del cerebro, lo que afecta la comunicación entre distintas áreas cerebrales responsables de funciones como la atención, la memoria y el aprendizaje.
Además, la exposición constante a estímulos rápidos como los que ofrecen los teléfonos móviles reduce la capacidad de los niños para concentrarse y tomar decisiones de manera efectiva. El proceso creativo se ve severamente limitado, ya que la pantalla se convierte en una forma rápida de obtener placer sin esfuerzo, lo que, a largo plazo, afecta la capacidad de los niños para generar nuevas ideas o enfrentar desafíos.
La Ludopatía: Un Riesgo Real en la Niñez y Adolescencia
La ludopatía, o adicción a los juegos de azar y videojuegos, también está tomando fuerza entre los más jóvenes. Los desarrolladores de aplicaciones y juegos móviles diseñan productos que estimulan el sistema de recompensa del cerebro, liberando dopamina cada vez que el jugador alcanza un logro, lo que genera un ciclo de recompensa y gratificación que fomenta la dependencia.
“Muchos de estos juegos están diseñados con niveles, recompensas y elementos que incitan a los jugadores a seguir jugando, e incluso gastar dinero en compras dentro de la aplicación. Esta dinámica puede generar una adicción similar a la de las drogas o el alcohol, especialmente si el niño no comprende el valor real del dinero”, advierte el pediatra.
La posibilidad de jugar en cualquier lugar y en cualquier momento, sumada a la competencia en línea con otros jugadores, crea una experiencia inmersiva que puede resultar perjudicial para el bienestar emocional y social de los niños. Es por eso que la barrileteada de este año se centrará en advertir a los padres y educadores sobre este fenómeno y fomentar el diálogo sobre el uso responsable de la tecnología.
La Dopamina y la Diferencia entre Placer y Felicidad
Un aspecto clave de esta problemática es el papel de la dopamina, el neurotransmisor que se libera en el cerebro cuando experimentamos placer. Sin embargo, el placer está asociado a estímulos inmediatos y efímeros, mientras que la felicidad está relacionada con experiencias más profundas y duraderas. “Nos están vendiendo la idea de que el placer es lo mismo que la felicidad, pero la realidad es que la dopamina, al buscar constantemente placer, nos aleja de la verdadera felicidad, que está mediada por la serotonina, una sustancia que nos calma y nos conecta con el mundo de manera más auténtica”, explica el experto.
No se trata de demonizar la tecnología, sino de usarla de manera consciente y equilibrada. Los dispositivos móviles, como cualquier otra herramienta, pueden ser útiles, pero su mal uso puede tener consecuencias graves, especialmente para el cerebro en desarrollo de los más jóvenes. Este 28 de septiembre, al elevar los barriletes al cielo, se buscará concienciar a la población sobre estos riesgos y fomentar una reflexión sobre el uso saludable de las pantallas.
A través de este acto simbólico, los organizadores de la Barrileteada 2025 quieren enviar un mensaje claro: debemos ser responsables con el uso de la tecnología para que nuestros niños y adolescentes puedan crecer sanos, creativos, y emocionalmente equilibrados.
La Barrileteada es un evento anual que se lleva a cabo en todo el país el último domingo de septiembre, con el objetivo de promover la concientización sobre distintos temas de salud y bienestar. En ediciones anteriores, se han abordado problemáticas como la salud mental infantil, el cuidado del medio ambiente y la prevención de enfermedades.
Este año, la Barrileteada 2025 se celebrará a las 15 horas, con la participación de familias, escuelas y organizaciones de todo el país, que se reunirán para pintar el cielo con barriletes multicolores mientras envían un mensaje de prevención y educación.


