Un mes de junio con lluvias más moderadas que en mayo estaría confirmando los pronósticos climáticos que anticipan un invierno climático favorable. Los suelos se encuentran bien cargados de humedad, lo que genera condiciones propicias para el desarrollo de pasturas y la próxima siembra de maíz, de cara a una primavera que podría arrancar con buena base hídrica.
En el corto plazo, no se esperan precipitaciones tan abundantes, mientras que el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) aún no emite un pronóstico definido de lluvias para la región durante el trimestre junio-julio-agosto. Sí se proyectan temperaturas levemente por encima de lo habitual.
Según datos del 16 de junio, los niveles de agua útil en el suelo son elevados en gran parte de la Cuenca Oeste, generando condiciones inusualmente favorables para la producción. Solo algunas zonas anegadas limitan ese escenario. La buena disponibilidad forrajera, sumada a una relación de precios favorable (1 litro de leche equivale a 2,3 kilos de maíz), permite ofrecer dietas balanceadas que se traducen en mejores rendimientos individuales. La producción continúa creciendo: entre enero y mayo se acumuló un incremento del 12,4% respecto a 2024, y el último mes incluso superó los niveles de 2023.
Un semestre positivo, aunque con desafíos hacia adelante
El sector lechero culmina un primer semestre 2025 con resultados positivos, aunque no sin incertidumbre hacia la segunda mitad del año.
La producción continuará en aumento. Para octubre, sólo por estacionalidad, se espera un 20% más de leche que en la actualidad, y hay condiciones para sostener ese ritmo.
El mercado interno, aunque fortalecido, difícilmente absorba ese crecimiento adicional.
Por otra parte, la pérdida de competitividad en exportaciones limita las oportunidades del sector industrial y productivo.
Infraestructura, créditos y reclamos fiscales
En la última reunión de la Mesa Lechera de la provincia de Buenos Aires, el Ministerio de Desarrollo Agrario (MDA) informó sobre las nuevas líneas de crédito del BAPRO. No obstante, los productores insistieron en la necesidad urgente de avanzar con obras de manejo de cuencas hídricas y la mejora de caminos rurales, considerados claves para destrabar el potencial productivo del sector.
También se reclamó una actualización del mínimo no imponible del Impuesto a los Ingresos Brutos para los tambos, que no fue modificado en el último año, en parte por la falta de aprobación del presupuesto provincial 2025.
Agencia MTR