El Gobierno nacional anunció este martes la creación de un operativo especial en el partido de Nueve de Julio, provincia de Buenos Aires, para asistir a las zonas más afectadas por las intensas lluvias y el desborde de la Cuenca del Río Salado. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, confirmó la medida y detalló que el despliegue incluye un centro de operaciones que coordinará la ayuda humanitaria y las tareas de emergencia en los municipios rurales más golpeados por las inundaciones.
Desborde de la Cuenca del Río Salado y aislamiento de poblaciones
Las precipitaciones en la región, que comenzaron a principios de la semana, provocaron anegamientos generalizados, afectando caminos, viviendas y sistemas de drenaje. El desborde de la Cuenca del Río Salado ha dejado a varias comunidades aisladas, sin acceso a servicios básicos.
Según informó la ministra Bullrich, el gobierno implementará medidas urgentes para abrir rutas y asegurar el acceso a las zonas más afectadas.
“Vamos a poner recursos para abrir caminos e ir hasta las familias que están aisladas”, aseguró la funcionaria durante una conferencia de prensa realizada en la Casa Rosada, en la que estuvo acompañada por el jefe de Gabinete, Manuel Adorni. Bullrich también destacó que el operativo incluirá trabajos de limpieza de zanjas, desagües y alcantarillas, a fin de garantizar la circulación por los caminos y permitir el ingreso de los equipos de asistencia.
Centro de operaciones en Nueve de Julio
El centro de operaciones que se instalará en Nueve de Julio será clave para coordinar las labores de rescate, distribución de alimentos, medicamentos y demás insumos esenciales. Además, se prevé la colaboración de distintos organismos de seguridad y emergencias, entre ellos la Gendarmería Nacional y la Defensa Civil, que estarán al frente de las tareas de auxilio en las zonas más críticas.
Compromiso con la comunidad rural
El Gobierno ha reafirmado su compromiso con la comunidad rural afectada por esta emergencia, priorizando la atención a las familias que permanecen incomunicadas. “Es fundamental que lleguemos con la asistencia lo antes posible”, expresó Bullrich, destacando que las lluvias continúan y se prevé que las condiciones de los caminos empeoren en los próximos días, lo que hará aún más difícil la llegada de ayuda.
Un operativo integral para mitigar los daños
El operativo no solo incluirá la apertura de rutas y la distribución de recursos, sino también un plan integral de mitigación de los daños, que abarcará desde la asistencia médica hasta la provisión de alimentos y la reparación de infraestructura vial. El Gobierno también adelantó que en los próximos días se enviarán más equipos y maquinaria pesada para acelerar las tareas de limpieza y restauración de la normalidad en las áreas afectadas.
Situación crítica en la región
El impacto de las lluvias ha sido severo en varias localidades, especialmente en las zonas rurales de la provincia de Buenos Aires. Las autoridades provinciales y nacionales se encuentran en contacto constante para monitorear la situación, mientras que se evalúan los daños a largo plazo y las necesidades de reconstrucción.
Este operativo responde a la urgencia de la situación y a la creciente preocupación de los habitantes de las localidades anegadas, quienes han solicitado asistencia inmediata para poder regresar a la normalidad.
Próximos pasos
El Gobierno continuará trabajando en coordinación con las autoridades locales para asegurar que la ayuda llegue de manera rápida y eficaz a quienes más lo necesitan. Asimismo, se espera que en las próximas horas se emitan más actualizaciones sobre el progreso del operativo y las medidas adicionales que puedan tomarse en caso de que las condiciones climáticas sigan empeorando.


