Esta celebración nació para revalorizar la imagen masculina y femenina sin estigmas, reivindicando que la belleza no depende del cabello. Se originó en la década del 2000, cuando un grupo de personas calvas decidieron compartir sus experiencias y promover la aceptación de la calvicie en la sociedad. El propósito es doble: por un lado, busca crear conciencia sobre los estigmas asociados a la calvicie y, por otro, fomentar una actitud positiva hacia la diversidad en la apariencia.
Celebrar este día tiene varios beneficios, como promover la autoaceptación, crear comunidad y educar a la sociedad. La autoaceptación ayuda a las personas a sentirse cómodas en su propia piel y a aceptar su apariencia sin complejos. La comunidad fomenta la camaradería entre quienes comparten esta característica, brindando apoyo y comprensión mutua. La educación busca cambiar las percepciones negativas sobre la calvicie y promover una visión más inclusiva de la belleza. Para quienes celebran este día, es fundamental cuidar adecuadamente el cuero cabelludo. Proteger del sol con protector solar de amplio espectro y gorras o sombreros es esencial para evitar daños. Hidratar el cuero cabelludo con lociones o aceites específicos ayuda a mantenerlo saludable. Experimentar con diferentes estilos y accesorios también puede ayudar a sentirse seguro y expresar la personalidad.