
La Provincia de Buenos Aires lanzó el Primer Recetario Bonaerense del Servicio Alimentario Escolar (SAE), una iniciativa que reúne preparaciones de los 135 municipios y que busca fortalecer la calidad nutricional del programa alimentario más grande del país. El acto se desarrolló en el Salón Dorado de Casa de Gobierno, encabezado por el gobernador Axel Kicillof y el ministro de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque, junto al ministro de Desarrollo Agrario, Javier Rodríguez, y el intendente de La Plata, Julio Alak.
Las recetas fueron elaboradas por los equipos de auxiliares de distintos establecimientos educativos y seleccionadas por la Dirección de Nutrición y Calidad de los Alimentos del Ministerio de Desarrollo de la Comunidad.
En ese marco, Kicillof destacó que “este proyecto reúne recetas que han sido elaboradas en los 135 municipios con la participación de los comedores y todos los que forman parte del Servicio Alimentario Escolar”.
Además, el gobernador subrayó que “la articulación entre distintas áreas del Estado nos ha permitido no solo pensar en las recetas más ricas, sino también en promover la calidad nutricional en beneficio de todos los pibes y las pibas” y añadió: “Este programa exhibe las distintas formas de abordar la cuestión alimentaria dentro del sistema educativo: es producto de la cultura local y del conocimiento, pero sobre todo del compromiso de cerca de 40 mil trabajadores y trabajadoras de las escuelas que todos los días les dan de comer a 2,5 millones de alumnos y alumnas”.
Por su parte, Larroque sostuvo: “En una Argentina tan compleja como la de Javier Milei, el SAE es una política de inmensa protección para nuestros pibes llevada adelante por la Provincia con mucho esfuerzo y gracias a una inversión de $80.000 millones mensuales”. “Este primer recetario llevó mucho trabajo, pero sobre todo mucho compromiso: no fue impuesto por nadie, surgió del saber de los cocineros y cocineras de las escuelas públicas bonaerenses”, agregó.
Durante el encuentro se realizó la entrega del carnet N°20.000 del Curso de Manipulación de Alimentos a una trabajadora auxiliar de la Escuela Primaria N°15 de Berisso. Este documento se otorga tras la culminación de la capacitación obligatoria que se dicta para personal de instituciones educativas, con el fin de fortalecer el sistema de inocuidad alimentaria.
Del acto también formaron parte la subsecretaria de Políticas Sociales, Bernarda Meglia; el director provincial de Seguridad y Soberanía Alimentaria, Bruno Bozzano, el director del SAE, Juan Sorrentino; y la directora de Nutrición y Calidad de los Alimentos, Lucia Cacciutto.
La iniciativa comenzó en 2024 que empezamos a recolectar recetas que tenían que ser reales, que existan en las escuelas y que cumplan con los lineamientos nutricionales del marco alimentario nutricional, en conjunto con el trabajo de las nutricionistas en territorio”, explicó Cacciutto al respecto.
“A medida que iban recorriendo escuelas e identificando las preparaciones de cada distrito, tenían que ser buenas en términos nutricionales, pero también aceptadas por los chicos y las chicas en las escuelas, que sean recetas que les gustan, y a su vez que tengan alguna historia de la identidad detrás para contar”, sostuvo.
La impresión del recetario fue financiada por UNICEF, BID y FONPLATA, organismos internacionales que respaldaron el proyecto y junto a los que el Ministerio trabaja durante todo el año en instancias de formación, asistencia técnica y articulación, incluyendo encuentros con otras provincias para intercambiar experiencias y mejorar los servicios alimentarios escolares a nivel nacional.
Mediante el SAE el gobierno bonaerense llega a más de 2.5 millones de estudiantes de más de 11.700 escuelas públicas de los 135 municipios. Comprende la preparación de desayunos, meriendas y almuerzos. Esta política alimentaria se complementa con el Módulo Extraordinario para la Seguridad Alimentaria (MESA), que reciben niños, niñas y adolescentes escolarizados, para fortalecer la alimentación en los hogares bonaerenses; el equipamiento de más de 7.500 cocinas escolares con una inversión superior a 6.200 millones de pesos y la incorporación de 25 nutricionistas territoriales.
Por último, Kicillof destacó que “en este contexto tan difícil, con un plan económico que está dañando a todo nuestro entramado productivo, para nosotros es aún más importante sostener y fortalecer el SAE, que es el programa alimentario más grande del país”. “Es una inversión enorme que hacemos para cumplir con el mandato de un pueblo que tiene claras sus prioridades y que elige seguir acompañando a todas las familias bonaerenses”, concluyó.
Estuvieron presentes además el ministro de Gobierno, Carlos Bianco; la jefa de Asesores del Gobernador, Cristina Álvarez Rodríguez; la directora de Industrias y Productos Alimenticios del Ministerio de Desarrollo Agrario, Valeria Ontiveros; la consultora en Educación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Victoria Oubiña; la oficial de Salud y Nutrición de UNICEF Argentina, Verónica Risso Patrón; y el representante de UNICEF, Hilan Varga, junto a representantes de Consejos Escolares y directivos y auxiliares de los distintos distritos.
Recetas novedosas que nacen en las escuelas
El recetario recupera historias y prácticas que surgieron en las cocinas escolares, donde la creatividad se combina con el conocimiento nutricional para resolver desafíos cotidianos:
• Pizza con polenta y acelga (Berisso)
Nació como una alternativa para mejorar la aceptación de la acelga entre los estudiantes. El secreto, dicen las auxiliares: picarla “bien chiquita”.
• Arroz Primavera Feliz (Exaltación de la Cruz)
Una ensalada fría y nutritiva que incluye arroz, pollo, huevo y vegetales. Según sus creadoras, el toque final es “una pizca de amor”.
• Purés de colores (Laprida)
Remolacha para lograr el “Puré Peppa Pig” o espinaca para el “Puré Popeye”: una estrategia exitosa para promover el consumo de verduras.
• La torta de Ale (Castelli)
Alejandra la prepara con dedicación para 65 estudiantes, incorporando chips de chocolate o membrillo cuando es posible.
• Pastel verde con pollo (Chivilcoy)
A partir de un puré teñido con acelga, se presenta como “puré de Shrek” o “de dinosaurios”, con gran aceptación entre los chicos.
• Fideos con arvejas adaptados (Ezeiza)
Una receta procesada para que estudiantes con dificultades de deglución puedan compartir el mismo menú que sus compañeros.


