Una auditoría de la Empresa Aguas Bonaerense Sociedad Anónima – ABSA- está desencadenando hechos de corrupción que alcanzan a varias jurisdicciones.
Entre ellas está de Nueve de Julio, que costó el desplazamiento de quien logró que la Planta Potabilizadora se concretara y haya agua potable. Por ser el Jefe Regional, le alcanzó lo que ignoraba y no contaba con el aval del gremio.
Cuando un usuario necesita que se le instale el agua de red, la empresa le pide determinada documentación referida al inmueble. Con esos datos se analiza si la red llega a la localización solicitada y una cuadrilla de la misma ABSA es la encargada de realizar la conexión. Luego el trabajo se liquida y se cobra con la factura del servicio. Este procedimiento fue explicado a CN desde la central en La Plata.
En varias ciudades una vez iniciado el trámite y determinado el lugar se les plantea que se carece de personal o cuadrilla para llevar adelante la tarea, y se le propone a ese nuevo usuario que terceros calificados pueden llevar adelante ese trabajo y que el pago lo deben acordar con quien contraten.
En el caso de Nueve de Julio, surge de la Auditaría que A.S., a nombre de N.R. (el verdadero dueño sería A.C.), D. P. y A.L. son los tres terceros capaz de llevar adelante esa tarea a propuesta de la delegación ABSA de Avda. Cardenal Pironio entre Edison y Tomás Consentino.
El segundo de los señalizados jamás presentó una factura por lo cobrado y se investiga si esos montos serían compartidos. Se llegó a cobrar una conexión $ 17.000 y otra $ 18.000. Hasta un arquitecto se quejó y no vio la factura pese a solicitarla.
Pero hay más, en investigación. La presencia de agua turbia en la red domiciliaria, tras el desplazamiento del Jefe Regional sería una maniobra interna, creen en la central platense. Es más, a ellos les constan las quejas de los vecinos, los mensajes de ‘9 de Julio, Todos por el Agua’, y las informaciones de CN sobre el tema, pero oficialmente nunca les llegó esos reclamos desde la delgación local. Esto es la razón de esa sospecha de boicot.
Se suma que se abrían detectadas ampliaciones de la red de agua en varias cuadras en forma clandestina, incluidos barrios. A ABSA no solo no ingresó el dinero por esas tareas. Tampoco puede percibirlo ya que oficialmente no figura. Obviamente, jamás las autorizó por no constarles, pero que han surgido de la investigación interna. Todas ellas se hicieron sin respeto a la reglamentación y a los superiores les llamaba la atención tanto consumo en relación a la cantidad de medidores. Ahora, se enteran que muchos ‘enganchados’ hay en la red.
Este cuadro de irregularidades, denuncias penales por conexiones clandestinas y estafa a los usuarios o vecinos fue llegado a sede Tribunalicia en Mercedes.
Ahora la Unidad Funcional de Instrucción en que recayó las imputaciones empiezan su tarea.
Agencia MTR