El Papa Francisco, quien falleció el 21 de abril de 2025, habría celebrado hoy su 89º cumpleaños. Nacido como Jorge Mario Bergoglio, fue el primer pontífice latinoamericano en la historia de la Iglesia Católica. Su vida estuvo marcada por un compromiso profundo con los más pobres y su labor reformista, que transformó la imagen de la Iglesia.
El Papa Francisco, quien murió el 21 de abril de 2025 a los 88 años, dejó un legado complejo pero indiscutible. Su fallecimiento, producto de un accidente cerebrovascular que lo sumió en coma y causó una insuficiencia cardíaca irreversible, cerró una etapa histórica para la Iglesia. Hoy, 17 de diciembre, Francisco habría celebrado sus 89 años.
Nacido para la historia
Jorge Mario Bergoglio nació en Buenos Aires el 17 de diciembre de 1936, en el seno de una familia de inmigrantes italianos. Desde joven, mostró una vocación religiosa que lo llevaría a convertirse en el primer pontífice latinoamericano de la historia. Su elección en marzo de 2013, tras la renuncia de Benedicto XVI, fue un hito mundial. Antes de ser Papa, Bergoglio fue cardenal y arzobispo de Buenos Aires, y presidió la Conferencia Episcopal Argentina entre 2005 y 2011.
Su pontificado: reformas y desafíos
Como Papa, Francisco implementó una serie de reformas que sacudieron el statu quo de la Iglesia. Su papado fue caracterizado por su cercanía con los pobres y su fuerte discurso sobre el cambio climático y la justicia social. Fue un firme defensor de los derechos humanos y de la paz, y promovió el diálogo interreligioso. Uno de sus enfoques más polémicos fue su postura hacia las personas LGBTIQ+, a quienes ofreció una mirada más comprensiva, así como la ampliación de los poderes de los sacerdotes para absolver el aborto, lo que desató intensos debates dentro de la Iglesia.
Entre los momentos más destacados de su pontificado se encuentran su llamamiento global a la acción por el cambio climático, su condena a la pena de muerte y su histórica declaración: “¿Quién soy yo para juzgar?” respecto a la homosexualidad, un pronunciamiento que trascendió los límites de la Iglesia.
Los últimos meses de Francisco estuvieron marcados por un deterioro de su salud. En febrero de 2025, sufrió una bronquitis que evolucionó hacia una infección respiratoria y neumonía, lo que requirió varias semanas de hospitalización. Aunque fue dado de alta a fines de marzo, su estado de salud continuó siendo crítico. Durante esos días, pidió que sus funerales fueran sencillos, y expresó su deseo de ser enterrado en la Basílica de Santa María la Mayor, en Roma, rompiendo la tradición de ser sepultado en el Vaticano.
A su muerte, el Papa dejó una Iglesia marcada por sus reformas y contradicciones. Canonizó a más de 925 santos y beatificó a decenas de personas, promovió la diplomacia internacional y presionó por acuerdos ambientales. Sin embargo, sus esfuerzos de reforma fueron también objeto de críticas y resistencias dentro de la misma jerarquía eclesiástica.
Además, llevó adelante el proceso de Beatificación de Cardenal Eduardo Pironio, sacerdote nuevejuliense camino a la santidad.
Miradas y reflexiones: un Papa que cambió la historia
El Papa Francisco, con su estilo austero y su llamado a una Iglesia más abierta y compasiva, transformó la percepción de la figura papal y acercó a la Iglesia a los grandes debates contemporáneos.
A lo largo de su vida, sus frases y decisiones dejaron una huella profunda en la Iglesia Católica, En ese camino de reconocimiento la Diócesis de Nueve de Julio lanza un Almanaque 2026 en su recordación de manera que cada integrante de la comunidad lo guarde y luzca por su sentido práctico y con mensajes de fe y valores humanos.


