La ley que prevé el retiro de la licencia de manejo a los conductores que den un resultado positivo durante un control de alcoholemia comenzará a regir hoy en la Ciudad de Buenos Aires. Los conductores que pasen el límite máximo tolerado de alcohol en sangre de 0,5 gr/l quedarán inhabilitados a manejar un vehículo por un período que se extenderá por un mínimo de dos meses y un máximo que podrá llegar a los dos años.
En CABA, uno de cada cinco siniestros fatales se produce por el consumo de alcohol y el objetivo es evitar incidentes viales. Hasta ahora, si un conductor daba positivo al examen, se labraba un acta de contravención y se retenía su licencia del conductor -se otorgaba una licencia provisoria por 3 días corridos-. El vehículo sera remitido a una playa de acarreo.
Según informaron fuentes del Gobierno porteño, con la nueva reglamentación la penalización dependerá del dosaje que arroje el control vial: entre 0,5 gr/l y 1 gr/l la sanción será la inhabilitación de la licencia de dos a cuatro meses y el pago de una multa que irá de $7.950 a $53.000; si el resultado es mayor al 1 gr/l se aplicará la inhabilitación de la licencia por un período de cuatro meses a dos años y una infracción de $15.900 a 106.000, así como también se podrá aplicar de uno a 10 días de arresto.
La norma estará a cargo de la Secretaría de Transporte porteña y desde el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires también aclararon que aún si el conductor tiene su licencia registrada en un distrito que no sea CABA, la inhabilitación se producirá igual.
La norma dicta que el límite máximo tolerado de alcohol en sangre es de 0,5 gr/l para vehículos particulares, 0,2 gr/l para motociclistas y 0,0 gr/l para principiantes y conductores profesionales.