Motociclistas y peatones concentran la mayoría de las muertes en el tránsito en la Ciudad de Buenos Aires y en el país, según se desprende de los últimos informes publicados por organismos oficiales y organizaciones especializadas.
De acuerdo al informe de siniestralidad difundido por el Gobierno porteño, el 34% de las víctimas fatales en 2023 fueron motociclistas, mientras que el 45% fueron peatones. En tanto, las cifras a nivel nacional —según la ONG Luchemos por la Vida— revelan que el 47% de los fallecidos en siniestros viales fueron motociclistas y el 21%, peatones.
“La motocicleta es un vehículo de riesgo. No tiene carrocería protectora, depende del equilibrio del conductor y su volumen reducido lo vuelve poco visible para otros vehículos”, explican desde Luchemos por la Vida, entidad que hace años analiza el comportamiento de los motociclistas y promueve campañas de concientización vial.
A pesar de los riesgos, muchos motociclistas incurren en conductas imprudentes que ponen en peligro sus vidas y la de terceros. Entre los comportamientos más comunes observados se encuentran el no uso del casco, maniobras temerarias, circulación a contramano y exceso de velocidad.
En la Ciudad de Buenos Aires circulan actualmente unas 73.000 motocicletas, de las cuales el 31% se utilizan con fines comerciales. La presión por cumplir con tiempos de entrega o realizar más viajes empuja a muchos trabajadores a exponerse en el tránsito.
Si bien en zonas céntricas el uso del casco alcanza un 86%, esta cifra desciende bruscamente en barrios periféricos, convirtiéndose en uno de los principales factores de mortalidad en este grupo, en su mayoría jóvenes.
Para revertir esta tendencia, Luchemos por la Vida lanzó una nueva campaña nacional con presencia en radio, televisión y redes sociales bajo el lema: “Cuidate, vos que tenés cerebro, usá casco”. El objetivo es reforzar la percepción del riesgo y fomentar el uso del casco de manera consistente.
Desde la organización insisten en que mejorar la educación vial, especialmente al momento de tramitar la primera licencia de conducir, así como intensificar los controles y sancionar a quienes incumplen la ley, son pasos fundamentales para reducir la siniestralidad y proteger vidas.
Agencia MTR