Emmanuel Soria de 34 años y Maxi Ludvik de 29 son dos amigos marplatenses que decidieron ir a ganar euros trabajando durante el verano europeo.
Se instalaron en Málaga, una zona de alto turismo en España, y allí emprendieron el cometido.
El pasado domingo 27 de agosto, decidieron pasar su día de descanso en la playa. Se llevaron dos tablas y los remos para practicar “paddle surf“ y como, buenos argentinos, un equipo de mate.
Pero algo pasó y desde ese domingo, nada se sabe de ellos.
Ese día se produjo una suerte de tormenta o de fuertes vientos en la zona, lo que hizo difícil permanecer en el agua, sobre todo en una tabla y relativamente lejos de la costa.
Santiago Soria, hermano de Emmanuel, fue el encargado de dar la voz de alerta. Se comunicó con la policía para advertir que los dos jóvenes no regresaban y que solo habían salido para desayunar – tomando mate – sobre las tablas a unos metros de la costa.
Enseguida se activó un sistema para intentar localizarlos. Además, varias pequeñas embarcaciones fueron sorprendidas en el mar y necesitaron ayuda.
El ayuntamiento de Málaga y la policía nacional desplegaron lanchas y barcos de patrulla, helicópteros y hasta un avión para recorrer la zona que pudieron haber llegado a recorrer ambos argentinos.
A todo esto, sus familias con la ayuda de marplatenses, que recaudaron fondos para el viaje, volaron a Málaga el 29 de agosto y presionan para que siga la búsqueda.
Hasta el momento, solo encontraron una de las dos tablas, en pleno Mediterráneo, a 17 km, al lado de un pesquero y parte del equipo de mate. No es una buena señal porque indica que efectivamente algo les ocurrió. Por lo menos, uno de los dos no pudo seguir remando.
Desde entonces familiares y amigos de los jóvenes realizaron diversas manifestaciones para reclamar que no cese la búsqueda de los jóvenes. Ignacio Soria, hermano de Emmanuel, reconoció que el círculo íntimo de los jóvenes es “consciente que son pocas las posibilidades de encontrarlos con vida”, salvo que haya “un milagro”.
“El alcalde de Málaga se solidarizó con nosotros y va a intentar seguir presionando lo más que se pueda para que la búsqueda no pare”, al tiempo que reiteró que permanecerán en la ciudad hasta que encontrar a los jóvenes.
Soria explicó que la familia maneja dos escenarios: “Esperamos un milagro como buena noticia y si la noticia es mala, queremos llevarnos los cuerpos de los chicos. No vamos a parar hasta que aparezcan; no nos vamos a ir de Málaga sin ellos”.
“Somos conscientes de que hay muchas posibilidades de que no ocurra el milagro, pero no nos vamos a ir sin los cuerpos”, dijo Soria tras resaltar que la Guardia Civil española “buscó por todos los frentes, fueron hasta la Isla de Alborán que está mar adentro”. “También hay un aviso para Marruecos, Argelia y Túnez, es muy grande el frente que están abarcando porque son muchos días desde que desaparecieron y siguen buscando”, explicó Soria.
Añadió que las cámaras de seguridad que rodean a la costa que muestran la llegada de Emmanuel y de Maximiliano a la playa, pero no hay rastros de los chicos y no vieron nada relevante, explicó Ignacio Soria.