El Día del Vecino fue instituido por Romeo Raffo Bontá, quien desde la Asociación Vecinal de Villa del Parque en la Ciudad Autónoma de Buenos evocando el aniversario de la segunda fundación de la ciudad de Buenos Aires, el 11 de junio.
La fecha quedó plasmada oficialmente en 1990 por decreto de la Ciudad bajo el nombre de “Día del Vecino Participativo”.
La intención es destacar la importancia del trabajo en conjunto entre las organizaciones barriales, los vecinos y el Estado, junto a la presencia de asociaciones civiles, culturales y deportivas.
Desde entonces, varias ciudades del país celebran el día del vecino a punto tal que quedó como fecha nacional.
El vecino – del latín vicīnus, de vicus, barrio, lugar -, en principio es la persona que vive relativamente cerca de otra. En un sentido estricto es un término que se aplica a las personas cuyas casas están contiguas; en un sentido más amplio se aplica a los habitantes de un mismo barrio, pueblo o ciudad.
En tiempos coloniales, vecino era un título nobiliario que permitía al individuo opinar en las juntas de gobierno. Era un reconocimiento a determinadas características.
Esa idea de compromiso a los fines de resolver problemas domésticos, sea en su cuadra, barrio, pueblo o ciudad, hace que cada persona reconozca en esas personalidades a aquel capaz de ser solidario con el conjunto y encuentre de manera optimista soluciones a problemas o temas cotidianos.
A quienes son capaces, sin egoísmo, de representar ese espíritu, los llamamos, buen vecino.
A todos ellos, Feliz Día, Vecino!
Agencia MTR