Es la primera vez desde la creación de la Mesa de Enlace agropecuaria en 2008 que la dirigencia agraria concretará en forma dividida una medida de fuerza contra la política oficial.
Comienzan un paro por tres días donde no comercializarán carnes y granos, al tiempo que han adelantado que no se va afectar el mercado de consumo.
El cese de comercialización fue convocado por las otras tres entidades de la Mesa de Enlace: la Sociedad Rural Argentina (SRA), Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro) en “rechazo a las políticas agropecuarias que el gobierno nacional lleva adelante y que han provocado una situación crítica para todos los sectores productivos del país”.
La FAA consideró que “no es oportuna” la convocatoria a un cese de comercialización en un contexto donde hay “miles de pequeños y medianos productores endeudados, y tanta urgencia por comercializar” su producción, pero aclaró que “seguirá siendo parte” de ese nucleamiento; también el resto de la entidades negó una ruptura.