La Secretaría de Salud, brinda algunas sugerencias a tener en cuenta ante la llegada del invierno y una nueva ola polar.
El frío genera las condiciones propicias para el contagio de virus respiratorios porque los ambientes permanecen cerrados, los microorganismos quedan en las superficies de los objetos y las personas entran en contacto con ellos.
Para evitar la propagación de los virus y bacterias que provocan Gripe, Bronquiolitis, Bronquitis y Neumonías, los más frecuentes a esta altura del año, se recomienda por un lado, la vacunación contra la Influenza H1 N1 a los llamados grupos de riesgo, a lo que se debe sumar el lavado de manos frecuente, la ventilación e higiene de los ambientes, cubrirse la boca con el pliegue del codo cuando se tose.
Para prevenir las enfermedades respiratorias en los más chicos, se recomienda amamantar en forma exclusiva hasta los 6 meses, ventilar los ambientes, evitar que el niño esté expuesto al humo del tabaco o de braseros, mantener las vacunas al día y evitar lugares cerrados con alta concentración de personas.
Los padres no deben “dejarse estar” en relación a la consulta. Es clave ver al pediatra o concurrir al Centro de Salud más cercano ante los primeros síntomas de agitación o dificultad respiratoria, porque el diagnóstico y tratamiento tempranos en los menores de dos años es lo único que evita cuadros severos e incluso muertes.
Las importantes bajas temperaturas suelen dar lugar al uso de métodos poco seguros de calefacción. Al respecto, se recomienda evitar los artefactos que puedan emanar monóxido de carbono dado que resulta sumamente tóxico y, en muchos casos, fatal. Los braseros, cocinas, calefones y estufas pueden liberar este gas, imperceptible, debido a obstrucciones en sus tirajes, mala colocación, falta de controles periódicos o ausencia de ventilación.
La exposición al monóxido, incluso por un período breve, produce intoxicación. Unas pocas partículas son suficientes para alterar el funcionamiento del sistema nervioso, y pueden provocar desde cambios de humor y cefaleas (dolor de cabeza) hasta lesiones neurológicas irreversibles.
El efecto nocivo y la gravedad del cuadro dependen de la concentración de las emanaciones en el aire, del tiempo de exposición-inhalación, y de las condiciones de cada individuo, como la edad, y el estado general de salud.
La revisión periódica de los artefactos para calefaccionar y el respeto por las normas de instalación son fundamentales para evitar los envenenamientos con monóxido de carbono.
CONSEJOS CONTRA EL MONOXIDO DE CARBONO
– Instale solamente artefactos que estén aprobados.
– Recurra siempre a gasistas matriculados para instalar y verificar el funcionamiento de los
aparatos de gas.
– Evite el uso de braseros.
– Mantenga siempre ventilados los ambientes en invierno.
– Asegúrese que el tiraje de los artefactos no esté obstruido o desconectado.
– No obstruya los conductos ni rejillas de ventilación de los ambientes.
– Verifique que la llama de los artefactos sea de color azul.
No instale calefones en los baños.
Apague los artefactos de gas durante la noche.
Dirección de Bromatología
Agencia MTR