Este 25 de mayo de 2025 se celebra por segunda vez el Día Mundial del Fútbol, una fecha proclamada oficialmente por la Asamblea General de las Naciones Unidas mediante la resolución A/RES/78/281, en reconocimiento a la extraordinaria capacidad del fútbol para promover la paz, la salud, la igualdad de género, la inclusión social y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
La elección del 25 de mayo no es casual: en esa fecha se conmemora el centenario del primer torneo internacional de fútbol con participación global, celebrado en los Juegos Olímpicos de París de 1924. Un siglo después, el fútbol sigue demostrando que es mucho más que un deporte. Es un lenguaje universal, una herramienta de transformación social y un puente entre culturas y generaciones.
Un balón que conecta al mundo
De todas las disciplinas deportivas, el fútbol ocupa un lugar especial por su alcance y popularidad. Su capacidad para reunir a personas de distintas edades, géneros, culturas y condiciones socioeconómicas lo convierte en una poderosa plataforma para el cambio positivo.
“El fútbol es el único deporte que une a la gente, no importa si eres rico, pobre, negro o blanco. Es una nación. Esta es la belleza del fútbol”, decía el legendario Pelé, embajador de buena voluntad de la UNESCO.
La Asamblea General subraya esta cualidad en la resolución, en la que también se destaca el papel fundamental de organismos como la FIFA y las federaciones nacionales y regionales en la promoción del fútbol como vehículo de valores y cooperación global.
Fútbol por la inclusión, la salud y la igualdad
Además de ser un deporte de masas, el fútbol se ha convertido en un espacio de integración social. En Suiza, por ejemplo, se celebró recientemente la primera Copa UNITY, una iniciativa conjunta entre la UEFA, ACNUR y autoridades locales, en la que participaron ocho equipos formados por personas refugiadas y comunidades de acogida. El objetivo: mostrar cómo el deporte puede derribar barreras y construir puentes.
Por otro lado, el fútbol ha sido también un instrumento para empoderar a mujeres y niñas, combatiendo estereotipos y promoviendo la igualdad de género, dentro y fuera del campo.
“Quiero que todas las niñas tengan la oportunidad de ser lo más decididas, exitosas y felices que puedan ser”, afirma Marta Vieira da Silva, embajadora de buena voluntad de ONU Mujeres.
El fútbol, además, ha demostrado ser un aliado clave en la promoción de la salud y el bienestar. Programas como Deporte para la Salud de la OMS utilizan la actividad física como estrategia preventiva frente a enfermedades crónicas y para fomentar estilos de vida activos y saludables.
Una celebración global con visión de futuro
El logotipo oficial del Día Mundial del Fútbol refleja este espíritu de unión a través de un diseño de formas interconectadas que evocan la figura de un balón, símbolo de la unidad global. Las Naciones Unidas han invitado a gobiernos, instituciones académicas, organizaciones sociales y al sector privado a sumarse a esta jornada a través de eventos, campañas educativas y actividades deportivas.
Asimismo, el programa Fútbol por los Objetivos, lanzado en 2022, continúa consolidándose como la plataforma global para que la comunidad futbolística contribuya activamente a la Agenda 2030.
“La pasión por el fútbol puede ser un vehículo poderoso para lograr un mundo más justo, saludable y en paz”, expresó el exfutbolista Didier Drogba, embajador de la OMS, al sumarse a la celebración.
Una fecha para recordar que todos jugamos en el mismo equipo
Más allá de las competiciones y los resultados, el Día Mundial del Fútbol es una oportunidad para reflexionar sobre el verdadero espíritu del deporte: unión, respeto, cooperación y esperanza.
Como expresó Zinedine Zidane, embajador del PNUD: “Con determinación y confianza en ti mismo, no hay nada que pueda impedirte lograr lo que quieres”. Ese mensaje, más vigente que nunca, encuentra en el fútbol el campo ideal para convertirse en realidad para millones de personas en todo el mundo.