“Me salvaron el casco y la mochila de Rappi, que tenía puestos”, cuenta entusiasmado Andrés Diante (26), internado desde hace 10 días a raíz de haber sido chocado de frente por un conductor alcoholizado cuando iba en moto por el túnel Av. Del Libertador, CABA, el viernes 21 de abril a las 4.30 de la mañana.
“Nunca me imaginé que me iba a pasar esto, ni en mi peor pesadilla… Ya adentro del túnel, cerca de la curva, no podía entender lo que veía… Un auto a todo lo que da que venía directo a mí. Fueron cinco segundos que precedieron una muerte ineludible… Al instante sentí el impacto fuertísimo de frente, trompa contra trompa… Entre la moto y mi caída había unos veinte metros de distancia. Yo volé y cuando me vi en el aire cerré los ojos, me acuerdo perfecto y vi como una luz… pensé ‘me estoy muriendo’… hasta que caí pesadamente en el pavimento… Ahora pienso cuánto peor podría encontrarme… Me salvaron el casco y la mochila de Rappi.”*
Cada día, jóvenes motociclistas pierden la vida o sufren graves heridas y pasan a engrosar la muy larga lista de víctimas en el tránsito que iban en moto. Lamentablemente, cada año, se incrementan los siniestros y las muertes en moto en Argentina. El 47% de los muertos en el tránsito son motociclistas. Muchos de ellos, fallecidos porque no tenían el casco o lo llevaban suelto. El casco salva vidas al evitar o amortiguar los golpes y heridas en la cabeza, devastadoras y discapacitantes.
Los motociclistas que usan casco tienen un 73% menos de mortalidad y hasta un 85% menos de lesiones graves que los que no lo usan. 2700 vidas se salvarían por año si todos los que circulan en moto y ciclomotor usaran siempre un casco homologado.
Cómo protege el casco
Fuente: Luchemos por la Vida