La celebración de este día remonta sus raíces al 28 de agosto de 1821, cuando el gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Martín Rodríguez, y su ministro Bernardino Rivadavia, firmaron un decreto que establecía la creación del Archivo General de la Provincia de Buenos Aires.
Esta importante institución fue inaugurada en la Manzana de las Luces, un emblemático edificio de la ciudad de Buenos Aires que albergó, desde entonces, todos los archivos públicos existentes hasta ese momento, acumulados desde la fundación de la ciudad.
El decreto de 1821 subrayaba la importancia de la conservación de los archivos para asegurar una historia precisa y detallada. Además, destacaba la necesidad de un sistema de clasificación y organización eficiente, afirmando que la multiplicación desmedida de archivos solo aumentaría costos y dificultaría la supervisión administrativa. Este enfoque pionero marcó el inicio de una tradición que sigue vigente en
Con el proceso de federalización de Buenos Aires en 1880, el Archivo General cambió su nombre a Archivo General de la Nación y se trasladó al edificio donde previamente funcionaba el Congreso Nacional, actualmente sede de la AFIP. En 1950, se trasladó a su ubicación actual en la Avenida Alem 246, donde continúa resguardando una vasta colección de documentos que abarca desde el período.