Miles de personas con cánticos, menajes de agradecimientos y un clima festivo se camina hacia Luján, en el marco de la 48va. peregrinación que año a año se hace a comienzos de octubre.
Todo comenzó desde la Parroquia de San Cayetano, ubicada en el barrio de Liniers de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, rumbo al Santuario de la Patrona de la Argentina. Se marcha con el lema “Madre, míranos con ternura, queremos unirnos como pueblo”.
En un clima festivo, la imagen de la “madre de Luján” salió de la parroquia a las 10 entre rezos y al grito de “¡Viva María!, que no nos deje solos que la vamos a acompañar”, en una jornada soleada y primaveral.
La primera vez que la comunidad de fieles emprendió este desafío fue el 25 de octubre de 1975 y, en aquella ocasión, fueron cerca de 30.000 los que caminaron.
A lo largo del recorrido, unos 60 km. hay 6.500 voluntarios, 40 puestos de apoyo y 60 puestos sanitarios a lo largo de todo el camino.
El objetivo es caminar a pie para unidos en la fe y oraciones, se llegue al Santuario de Nuestra Señora de Luján. Es que en la peregrinación, cada pie cansado, cada zapatilla gastada, esconde una historia. Conscientes de eso, quienes permanezcan por la noche, encenderán una vela a la cero hora mañana domingo 2 de octubre para iluminar así las intenciones de todos.
Ya frente a la Basílica los aguarda el cardenal Mario Aurelio Poli, arzobispo de Buenos Aires, quien presidirá la tradicional misa de las 7 en la Plaza Belgrano.
Agencia MTR