En la localidad bonaerense de Daireaux, un niño de 11 años murió tras recibir un disparo accidental en una vivienda cuando su amigo de 14 le exhibió un fusil, y se disparó accidentalmente.
El hecho se registró en calle Celestino Torres al 700 de es localidad.
Todo comenzó cuando un adolescente de 14 años hijo de un herrero acostumbrado a ir de caza, le exhibió a su amigo de 11, hijo de un comerciante que tiene unsa de repuestos, un fusil en el interior de la casa.
Todo se originó cuando mayor que a veces acompañaba a su padre de cacería, le explicaba cómo se cargaba el fusil y como era su funcionamiento.
En ese momento, el chico recibió un disparo en el rostro que le causó la muerte a los pocos minutos, tras lo cual efectivos de la comisaría local fueron alertados.
Según las fuentes, el personal policial alojó al amigo de la víctima en el hospital zonal debido a que por su edad es inimputable.
Los investigadores secuestraron el arma de fuego para ser peritada y determinar cómo fue que se efectuó el disparo.
Las fuentes añadieron que la Fiscalía de Responsabilidad Penal Juvenil 2 del Departamento Judicial Trenque Lauquen caratuló la causa como “homicidio preterintencional o culposo”.
Se investiga cómo se produjo el accidente.