Durante la última celebración del día Domingo de Pascua, que se realizó en el Santuario de Fátima, el obispo diocesano, monseñor Ariel Torrado Mosconi exhortó a los fieles a renovar la fe en Cristo para alcanzar consuelo ante los sufrimientos.
“Este domingo de resurrección debemos tener la profunda convicción de que Jesús es más fuerte que cualquier sufrimiento que estemos pasando y que, con su resurrección, venció al mal y a la muerte” -.De este modo dio su último mensaje pascual-. “Por eso pidamos que el Señor transforme y cambie nuestros desalientos y tristezas por la verdadera alegría que se funda en su resurrección”.
Por otra parte manifestó su deseo para que esta celebración, la más importante para la cristiandad, “no quede como algo meramente social y en un simple intercambio de saludos cordiales sino que nos sirva para ahondar y profundizar en el sentido teologal: la Pascua es la fuente de la alegría, de la verdadera felicidad cristiana”.
Comentando el evangelio de los discípulos de Emaús, que correspondía a la misa vespertina de la pascua, hizo referencia a que Cristo no nos deja solos en el camino de la vida, Él siempre nos acompaña, y en esta verdad de fe está nuestra esperanza en medio de las dificultades de la vida. Así como estos discípulos cambiaron su tristeza en esperanza, así también nosotros no podemos volver a nuestras actividades sin una alegría que brota de la fe.
Luego alentó a los presentes a renovar su “profunda convicción” de que “Jesús, como buen pastor, nos acompaña y camina a nuestro lado” porque “sólo Dios puede salvarnos de la soledad, de la tristeza, de la muerte y de la desesperación. Es de esta experiencia de donde ha de brotar la fuerza para la misión de anunciar el evangelio”.
Agencia MTR