La ocupación británica de las islas Malvinas fue una operación militar del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda que el 3 de enero de 1833 tomó el control de las islas.
Ese día dos buques de guerra desalojaron a la guarnición argentina de 26 soldados, quienes se marcharon 48 horas después.
Pocos días antes, el 20 de diciembre de 1832 la corbeta estadounidense USS Lexington destruyo las defensas militares del asentamiento argentino de Puerto Soledad, en la isla homónima.
Era tiempo de paz en el marco de las relaciones entre la Confederación Argentina y el Reino Unido. El gobierno de entonces hizo el reclamo diplomático. Desde entonces, las islas han estado bajo dominio británico, excepto durante el breve período de la Guerra de Malvinas en 1982, con el final por todos conocidos.
El Gobierno de la República Argentina considera que el 3 de enero de 1833, “las islas fueron ocupadas por fuerzas británicas que desalojaron a la población (de origen argentino) y a las autoridades argentinas allí establecidas legítimamente, reemplazándolas por súbditos de la potencia ocupante”.
Las autoridades argentinas reclamaron inmediatamente la agresión injustificada llevada a cabo en tiempo de paz y amistad entre las dos naciones, continuando hasta la actualidad de forma diplomática.
Es de señalar que sistemáticamente, todas las resoluciones de las Naciones Unidas refieren que las Malvinas son Argentina; sin embargo, el gobierno inglés hace caso omiso a las mismas y sigue ocupando el territorio, pretendiendo que los Kelpers se pronuncien en el marco de la autodeterminación de los pueblos, principio respetado en el derecho internacional. Si cualquier vecino usurpara una propiedad y pone a una persona de su confianza para que la custodie o cuide, de ser consultado sobre la titularidad de la propiedad, cuál sería su respuesta?. Lo mismo sucedería con los kelpers.
Agencia MTR