Tras dejar una ofrenda floral en el busto de Julio de Vedia, fundador de la ciudad el 27 de octubre de 1863 – ubicado dentro del Palacio Comunal- , Walter Battistella encabezo el acto central conmemorando el 152 aniversario de aquel hecho histórico.
Acompañaron al Jefe Comunal, en uno de sus últimos episodios públicos ante de terminar su mandato, el electo Intendente, Mariano Barroso, el Presidente del Concejo Deliberante, Alberto Capriroli, ediles, el Obispo de la Diócesis de Nueve de Julio,Monseñor Martín de Elizalde, la Inspectora Jefa Distrital, Iris Esterlich, el Diputado Jorge Silvestre, el Presidente del Consejo Escolar, Carlos ‘Lalo’ Brangeri, representantes de las fuerzas vivas,e instituciones de la comunidad, entre otros, Luis Valinoti-Cámara de Comercio y Omar Malondra – CEyS Mariano Moreno, y Gildo Miglerina -Sociedad Italiana-.
Todo comenzó con el ingreso de las banderas de ceremonias de escuelas del distrito, y tras el izamiento de la bandera nacional a cargo del Intendente Walter Battistella, Iris Esterlich y el diputado Jorge Silvestre; la bonaerense, a cargo del electo Intendente, Concejal Mariano Barroso y el Jefe de la Policial Comunal, Comisario Inspector Sergio Rainoldi; y la nuevejuliense, que lo hicieron, el ex-Jefe Comunal, Rodolfo Menedez,el Presidente de la CEyS ‘Mariano Moreno’,Omar Malondra y Gildo Miglierina, titular de la Sociedad Italiana de socorros Mutuos. Luego se escucho el Himno Nacional.
Tras ello, dejaron sus bendiciones el pastor Emilio Peralta y el Obispo Martín de Elizalde.
A continuación, el Intendente,Walter Battistella a sabiendas que este es uno de sus últimos discursos antes de dejar el mandato el 11 de diciembre expreso que ‘Estamos satisfechos por haber sido un eslabón más en la cadena de la historia de nuestro querido 9 de Julio’.
El acto cerro luego de haberse escuchado la canción de la ciudad, interpretada por marcos Galvani y ‘Titi’ Lozano y bailada por el Ballet Municipal que conduce, Héctor Bonello.
Mensaje textual del Jefe Comunal nuevejuliense:
Nuestra ciudad arriba hoy a los 152 años de su fundación.
El 27 de octubre de 1863 nace nuestra historia, una historia que se fue forjando generación tras generación, con la identidad propia y distintiva de los nuevejulienses, en la que resaltan especialmente algunos aspectos fundamentales: el esfuerzo, el trabajo y la perseverancia para lograr el objetivo común de quienes han habitado y habitamos esta tierra, que es el de lograr el progreso y el bienestar de todos.
9 de Julio ha crecido y ha sostenido inalterables estos valores a lo largo del tiempo, pese a los distintos procesos sociales, económicos y políticos que sufrió y padeció el país.
El conjunto de la ciudadanía siguió apostando al futuro de manera permanente, pese a los detractores y a quienes prefirieron postergar ese progreso en beneficio propio.
El transcurrir del tiempo nos ha demostrado que no hay nada ni nadie que pueda detener la fuerza de nuestro pueblo y sus deseos de trabajar por la concreción de sus sueños; porque pese a todo cada nuevejuliense sigue soñando con lo mejor para su familia y la de sus prójimo cada día, desde el primer minuto de la jornada, hasta el momento del descanso reparador.
Pasaron por nuestra historia cruentos procesos militares, políticas de todo tipo que atentaron contra nuestro desarrollo, fenómenos naturales y hasta el mismo olvido por parte de quienes nunca miran hacia el interior del interior; pero aquí estamos, trabajando y luchando siempre por esos ideales y esos sueños que nos dejaron nuestros mayores; aquellos que trazaron la primera senda.
Hoy, 9 de Julio, tras el reciente proceso electoral, encara una nueva etapa. Es de fundamental importancia que la misma continúe dándose en el marco del respeto por las instituciones de la democracia, pero también por un sano y constructivo disenso.
Mantener las ideologías, pero lograr que las diferencias no nos aparten de aquel rumbo común es una clave que no debemos pasar por alto. Respetar este precepto nos permitirá ser fieles y leales a nuestra convicción y decisión de luchar por el progreso de nuestra comunidad, lo que no admite diferencias; sentirnos satisfechos y orgullosos del paso por este mundo; por haber sido un eslabón más en la cadena de la historia de nuestro querido 9 de Julio; pero fundamentalmente nos entregará la paz de dejar en manos de nuestros hijos y nietos y de las generaciones futuras lo mejor de cada uno de nosotros en pos de una mejor calidad de vida para todos.
Agencia MTR