Según un informe de la consultora Focus Market, el 40% de los trabajadores registrados destinará este ingreso extraordinario para saldar deudas y cubrir gastos corrientes. Un 31% lo utilizará para cubrir gastos generales, como expensas, servicios, colegios y medicina prepaga, mientras que un 9% lo destinará a saldar compromisos pendientes y un 2% para abastecerse en el supermercado.
El director de Focus Market, Damián Di Pace, destacó que el aguinaldo ya no es visto como una oportunidad para disfrutar o ahorrar, sino como un recurso estratégico para llegar a fin de mes. La realidad cotidiana indica que los ingresos no alcanzan para cubrir todos los gastos del mes, y el salario se estabilizó pero sigue sin rendir.
La crisis ha generado un cambio en el patrón de consumo de los argentinos, y el uso del aguinaldo para gastos generales se ha disparado en comparación con años anteriores. El porcentaje destinado a la compra de dólares se mantuvo estable, pero el destinado a la compra de acciones disminuyó.
En este contexto, el aguinaldo se convierte en un recurso fundamental para sostener el consumo esencial del hogar, y muchos trabajadores ya no lo ven como una oportunidad para darse un gusto, sino como un salvavidas para cubrir sus necesidades básicas.