El presente informe del Centro de Economía Política Argentina analiza el comportamiento del mercado de trabajo, a través del abordaje de indicadores de actividad, empleo y desocupación, así como también de la población subocupada.
Se utilizó una metodología cuantitativa, en base a la información publicada por la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), analizando las tasas básicas del mercado laboral comparativamente con idénticos trimestres de años anteriores, en una comparación interanual.
El estudio se divide en cuatro apartados centrales:
Evolución de la tasa de desocupación:
Durante el primer trimestre de 2025 se registró un aumento en la tasa de desocupación respecto al mismo período del año anterior. Este incremento está vinculado a una caída en la generación de empleo y una menor absorción de fuerza laboral por parte del sector formal.Tasas de actividad y empleo:
La tasa de actividad se mantuvo relativamente estable, lo que sugiere que la población económicamente activa no ha cambiado de forma significativa. Sin embargo, la tasa de empleo descendió, marcando una menor capacidad del mercado para generar puestos de trabajo.Diferenciación entre empleo registrado y no registrado:
El análisis de la ocupación muestra una disminución en los trabajadores registrados, especialmente en el sector privado. En contraste, el empleo no registrado se mantuvo en niveles altos, lo que refleja un crecimiento del empleo informal como estrategia de supervivencia ante un contexto de menor dinamismo económico.Población ocupada demandante y subocupación:
Aumentó la proporción de ocupados demandantes de empleo —personas que, aun teniendo trabajo, buscan activamente otro—, así como la subocupación horaria. Esto indica una creciente presión sobre el mercado de trabajo, con trabajadores insatisfechos con sus condiciones actuales o con necesidad de mayores ingresos.
En síntesis, el primer trimestre de 2025 muestra señales preocupantes para el mercado laboral argentino. El aumento de la desocupación, la caída del empleo registrado y el crecimiento de la subocupación revelan un escenario complejo que exige atención por parte de las autoridades y políticas públicas orientadas a la inclusión laboral y la formalización del empleo.