Cada 30 de octubre no es un día más para la Argentina desde el año 1983. Tras varios años de violación de los derechos humanos y civiles en el país, luego de la Dictaura Militar que manejó de facto los destinos de la Patria entre 1976 y 1983, finalmente regresaba la Democracia.
Hubo elecciones el 30 de octubre de 1983.
Así es que esta jornada se celebra el Día de la Recuperación de la Democracia. Fue cuando la Argentina pudo volver a las urnas para ejercer un derecho que nunca, jamás, debió haber sido quitado.
Raúl Alfonsín se impuso en una elección histórica, convirtiéndose en nuevo presidente constitucional y asumiendo el 10 de diciembre de ese año. También se cambiaba la fecha de asunción de los elegidos en las urnas. Hasta entonces era cada 12 de octubre.
La recuperación de la Democracia en el país significa el pleno ejercicio de la Constitución, las libertades públicas, el estado de derecho, la tolerancia política y la vigencia de los derechos humanos.
Había dicho Alfonsín al ser electo: “Agradezco el esfuerzo, porque ha sido la participación de la ciudadanía argentina en su conjunto lo que ha garantizado que este proceso de democratización de los argentinos culminara con éxito”.
Y agregaba el nuevo mandatario de entonces: “Yo les pido que comprendan que iniciamos una nueva etapa en la Argentina. Es necesario, absolutamente necesario que todos comprendamos que este día en el que inauguramos una etapa nueva en la Argentina, inauguramos inauguramos un largo período de paz y de prosperidad y de respeto por la dignidad del hombre y de los argentinos. Este día en que recibimos el saludo alborozado de las democracias del mundo y muy particularmente de las democracias de los países de América Latina, como la de Uruguay, como la de Paraguay. Este día debe ser reconocido por los argentinos, como el día de todos. Acá hemos ido a una elección, hemos ganado, pero no hemos derrotado a nadie, porque todos hemos recuperado nuestros derechos”.