La Secretaría de Energía dispuso el pasado viernes que, desde el 1° de enero de 2019, las empresas distribuidoras de gas cobren en 24 cuotas un monto extra a lo ya facturado entre abril y septiembre, debido a la diferencia en el precio del dólar en esos meses. Es por ello que la Federación Económica de la Provincia de Buenos Aires (FEBA) manifiesta su total disconformidad y rechazo al dicho ajuste retroactivo de tarifas por considerarlo una alteración de los precios de los insumos y costos de los comercios e industrias afectados.
El Presidente de FEBA, Camilo Alberto Kahale, señaló: “Tanto el sector del Comercio bonaerense como el Industrial, fijaron sus precios en base a las tarifas vigentes al momento de realizar sus procesos económicos. Esto implicaría un nuevo golpe económico para la compra-venta comercial como para la producción industrial del país”.
“Los procesos económicos de los comercios e industrias se encuentran concluidos, los precios facturados ya fueron percibidos por los actores económicos que representamos y sería imposible para ellos alterar los contratos comerciales e industriales ya cerrados, pretendiendo cobrar a sus clientes la diferencia tarifaria que implica”.
Los empresarios nucleados por FEBA aseguran que a su vez, el fundamento jurídico en el cual se basa la medida –Ley de Convertibilidad 24076-, regulaba el sector cuando en la Argentina había tipo de cambio fijo, régimen económico que no rige actualmente.
“Instamos a las autoridades a retrotraer la medida dispuesta y restablecer el cuadro tarifario vigente. Solicitamos que se declare la nulidad de la resolución que autorizó a las firmas a cobrar un monto extra en 24 cuotas por consumo ya efectuado”, afirma Kahale quien concluye: “La recesión económica y la presión tributaria y financiera es cada vez más fuerte, situación que no permite afrontar costos adicionales incausados”.