Con motivo de celebrarse este 19 de noviembre la Primera Jornada Mundial de los Pobres, el obispo de la diócesis de Nueve de Julio, Monseñor Ariel Torrado Mosconi, convocó a los católicos a “tomar conciencia y reavivar el compromiso comunitario en favor de nuestro prójimo necesitado”. Para ello animó a las comunidades a pasar de las “lindas palabras” a las “obras concretas”.
Lo hizo en consonancia con el lema, “No amemos de palabra sino con obras”, que está basado en una cita del apóstol Juan. “El mandamiento de Jesús se hace más intenso debido al contraste que percibe entre las palabras vacías presentes a menudo en nuestros labios y los hechos concretos con los que tenemos que enfrentarnos”, aseguró el Papa Francisco en su mensaje para esta primera Jornada Mundial de los Pobres. Allí también subrayó que el amor no admite excusas: el que quiere amar como Jesús amó, ha de hacer suyo su ejemplo; especialmente cuando se trata de amar a los pobres”.
A fin de que la jornada cumpla con el objetivo que se conmemora, Monseñor Ariel Torrado Mosconi propuso cuatro líneas de trabajo tanto para los días previos, durante ella y los días posteriores. Incluyen entre otras cosas reflexiones sobre el mensaje del Papa en cada grupo, institución y/o movimiento así como que cada comunidad realice un gesto sencillo pero concreto como la visita a instituciones o lugares donde se visibilice la pobreza.
Por último convocó a los fieles a “tocar la carne de Cristo”. “Esta frase del Papa Francisco tiene un fuerte realismo y una honda densidad espiritual – opinó el prelado -. Por lo que debe movernos a una auténtica compasión, a superar los prejuicios ideológicos, sectoriales o de cualquier otro tipo…Y a arrancarnos del egoísmo, la mezquindad y la indiferencia”.
Agencia MTR